domingo, 20 de mayo de 2007

Mirá lo que opinan...

El otro día vi una encuesta en Yahoo. Preguntaban por qué no se les permite adoptar a las parejas homosexuales.
A mi la respuesta me parece obvia, simplemente porque las parejas homosexuales no están reconocidas legalmente en la Argentina.
Es muy molesto esto del no reconocimiento de nuestras parejas.
Ayer fui a un club, y tenía que pagar $ 1.000 para asociar a mi grupo fliar. Pero claro, en el “grupo familiar” no estaba incluida mi pareja ni sus hijos (mis queridos “hijastritos”).
En la Secretaría de Turismo de la Nación hay programas familiares de vacaciones, a muy bajo precio y más aún para el personal de la Nación, mi pareja y yo lo somos. Pero….no podemos pedir por ejemplo una habitación matrimonial y otras para nuestros hijos. Iríamos como dos flias. amigas. Todos amontonados en cuchetas, niños, madres (que son pareja), etc. ¿Qué promiscuo no?
Siguiendo con Yahoo, hay respuestas que son sólo ignorante prejuicio. Decía una por ejemplo, que las parejas homosexuales son antinaturales, la famosa “naturalización de la cultura”, de la que ya hemos hablado en otras notas.
Otra decía que los chicos saldrían con desviaciones, que los chicos para ser personas “normales” (y dale con lo normal y con lo natural) debían criarse en hogares con un padre y una madre.
Mis padres son heterosexuales y vivieron juntos más de 50 años. Una familia formal y cortés que hizo gala de su promesa ante el altar: “juntos hasta que la muerte los separe” y la verdad que todavía dudo si la muerte logró separarlos.
Pero el que me sacó de mi asiento, de donde leía tranquila tomando un café mañanero, fue uno señor que respondió haciendo un hermoso alegato a favor de los gay. Decía que los hombres homosexuales son en general muy buenas personas, pero que las lesbianas todo lo contrario.
Me agarró tanta indignación que quise contestarle. Pero la burocracia, queridos amigos y amigas, está también en Internet. Tenía que registrarme, crear una cuenta, darles mi Nº de teléfono, correo, Nº de zapatos y talle de vestido. Así es que abandoné la empresa sorprendida por constatar tanto prejuicio e ignorancia caminando por las calles de nuestro preciado planeta.
Estee bueno, todo un tema ¿no? Digo, el del prejuicio que se maneja entre los homosexuales. Y claro, que ingenuidad reflexiono, si no es más que una nueva muestra de la diversidad. No por compartir la preferencia por caminar la vida de la mano de una pareja de nuestro mismo sexo, nos hace coincidir en nuestras posiciones, idologías y sentimientos.

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